La ONU presiona por una solución de dos estados mientras EE. UU. e Israel boicotean la cumbre de alto nivel.

Una conferencia de alto nivel de las Naciones Unidas, copresidida por Francia y Arabia Saudita, se ha reunido en Nueva York para revivir los esfuerzos hacia una solución de dos estados para el conflicto israelí-palestino. La cumbre ha atraído a decenas de ministros y funcionarios internacionales, pero tanto Estados Unidos como Israel brillan por su ausencia, boicoteando el evento. El Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, y otros líderes han advertido que el conflicto está en un punto crítico, instando a una acción política audaz y al fin de la anexión y ocupación israelí. La conferencia tiene como objetivo establecer pasos concretos hacia la creación de un estado palestino y la estabilidad regional, aunque los críticos advierten contra la retórica vacía y enfatizan la necesidad de una verdadera rendición de cuentas. La ausencia de actores clave plantea dudas sobre la efectividad de la cumbre, pero la comunidad internacional está señalando una urgencia renovada por una resolución pacífica.